martes, 29 de mayo de 2012

Terrorismo contra convencionalismos

Yo le declaro la guerra a la normalidad,
si, a ti también que quisiste envenenar las horas con jazmines...
Me sobra tu vida.
Nos amputaremos el sexo
y diremos que es un tubérculo de madera.
Nos amputaremos los labios
y sabremos que nuestra identidad
tiene que ver con los naufragios.
Por fin no diremos nada.
Sabremos distinguir entre el silencio y los ojos.
Dame un código
y te daré mi lengua.
la epidermis, la temperatura,
las cosas alrededor nuestro inventan idiomas sintéticos.
La normalidad,
¿crees que no se da cuenta de que somos un esqueleto prematuro?
Tus besos me dan arcadas
porque saben a costumbre,
a edificios estrábicos,
a siestas programadas,
a colas del paro,
a facturas del gas.
Prefiero ser un poco menos feliz y sentirme distinta.
Yo me compadezco de tu normalidad.

sábado, 26 de mayo de 2012

Destruir ...dijo ella

Hoy dirás que esta es la noche definitiva,
que nos drogaremos sin decírselo a nadie,
que nos miraremos separadas por la música
y querremos gritar un mundo muerto,
el olor a pesticida del verano.

Y sabremos que han prescrito todas las facturas
que tenemos con la suerte,
que pudimos ser jóvenes
y tener labios como constelaciones enteras de mentrias fragmentadas.

Hoy dirás que esta es la noche definitiva.
Y querremos matarnos y ser felices
sin saber dónde acaba el éxtasis
y dónde empieza la naúsea del futuro.

Porque todo instante es la antesala de una herida,
existir pesa más que esta noche,
y es más definitivo que el oxígeno.

Los segundos que nos separan de la muerte,
le sonríen a tus ojos cenicientos,
hay insectos aprendiendo a vivir en el olor de las cosas,
se intoxican del hedor de tus ombros,
y extraen de las pieles sus conclusiones.
Hasta la vida hace crucigramas,
y en ellos estamos nosotras enmedio de esta noche,
que no es definitiva,
que no tiene sus venas propias,
que se sirve de muchas caras sin apellido,
y se pierde en el desorde biográfico de tu risa,
que es el grito de quién ha llegado al final del edificio,
oscuridad del árbol atrapado por su raíz inerte,
oscuridad que ha vomitado la tiniebla,
templo de madrugada y la locura.

Que definitiva está la noche...

viernes, 18 de mayo de 2012

TAMBIÉN NOS AMPUTARÁN LA LUNA

No soy todas tus películas favoritas
ni los pasos inversos de un animal sigiloso,
no soy la receta de una duda,

ni los añicos del espejo en el que ya no se miran las heridas.

Ni siquiera soy la mitad de mi nombre,
ni lo que el invierno ha dejado de nosotros.

martes, 8 de mayo de 2012

Mayo, Madrid, Macarrones, y otras circunstancias para volver a escribir...

O bien la sangre,
o solo la intuición.
O el cuerpo pesa
o es asco el gesto de los rostros borrados.
La mutilación sin la euforia.
La soberanía en la jaula.
O bien la sangre
o rojo-labio-herida.
La lucha o la huida.
Alguien tuvo dos vidas
porque vivió en dos siglos
y decidió que todas sus muertes debían morir.
O el tiempo pesa
o el espacio es una fotografía dónde ya somos viejos.
Pero el peligro no es la nieve, sino el hielo
o todas las formas que tuviste de destruirte a tiempo.